¿Qué le pides al 2016?
Poco a poco vamos consumiendo los últimos días de este 2015 y es el momento en que muchas personas aprovechamos para hacer balance del que ha sido el año que dejamos atrás.
Cada cual sabe si ha conseguido todo aquello que quería y si ha hecho todos los “deberes” que se había planteado a principios de año. Seguro que unos habréis cumplido algunos de los planes o casi todos, otros tendréis vuestra particular lista a la mitad o todavía llena de cosas para hacer.
Sea como sea, pienso que está muy bien hacer esta revisión anual a pesar de que quizás estaría mejor si fuésemos evaluando el cumplimiento de nuestras propuestas personales poco a poco y en plazos más cortos para ser conscientes de todos nuestros avances y de todos aquellos aspectos que necesitamos ir mejorando.
Aún así, lo que no tenemos que perder de vista es la importancia de aprender a establecer objetivos para facilitar su cumplimiento y no frustrarnos en el intento. Así que a continuación os planteo…
“Trucos” para marcarnos metas para este 2016:
1- Las metas específicas y realistas son las más fáciles de cumplir. Cuando se trata de conseguir un cambio, las personas que tienen éxito son las que se fijan metas realistas y específicas. Por ejemplo, «Me propongo reciclar las botellas de plástico, el vidrio, las revistas y los periódicos» es una meta mucho más sencilla de lograr que decir «Me propongo hacer algo por el medio ambiente». También es importante fijarse un número de metas realistas. Es mejor fijar pocas y conseguirlas que no muchas y que después se pierdan por el camino.
2- Se necesita tiempo para que un cambio se convierta en un hábito establecido. Probablemente si te propones para este 2016 hacer más ejercicio físico, conseguirlo te llevará un par de meses antes de que un cambio como sería ir a hacer ejercicio tres veces a la semana se convierta en parte de tu vida. Esto pasa porque tu cerebro necesita tiempo para acostumbrarse a la idea que tu nuevo hábito es parte de tu rutina regular.
3- Repetir una meta hace que perdure y se mantenga presente. Expresa tu meta en voz alta cada cierto tiempo para recordarte a ti mismo/a qué quieres conseguir y para qué te estás esforzando y si no escribirla también ayuda. Cada vez que recuerdas tu meta entrenas tu cerebro para que haga posible lograrla.
4- Complacer a otras personas no funciona. La clave para hacer que un cambio sea permanente es encontrar que el deseo nazca de ti. Tienes que hacerlo porque realmente quieres, no porque un amigo, amiga, entrenador, padre u otra persona quiere que los complazcas. Será más difícil mantenerte motivado si haces algo por obligación o para satisfacer otra persona.
5- Los impedimentos no significan fracasos. Las equivocaciones son parte del proceso de aprendizaje. Puede ser que necesites varios intentos para conseguir tu meta, pero esto no importa; es normal que te equivoques o que te rindas algunas veces cuando intentas hacer un cambio. Así que recuerda que todas las personas cometen errores y no te preocupes en exceso por eso; simplemente recuérdate a ti mismo/a que puedes continuar el cumplimiento de tus metas si te lo propones.
Bueno, aquí tienes algunos consejos para hacer tus planes pero recuerda que tú eres quienes decides cómo escribir tu propia historia.
Qué historia quieres contar cuando termine el 2016?