Justo hace un año dedicamos un par de posts a las Navidades y a cómo organizar los propósitos de Año Nuevo (podéis revisar “Elige tu Navidad” o “¿Qué le pides al 2016?”) .

 

A pocos días de finalizar este 2016, pensamos que es recomendable hacer un repaso de los objetivos conseguidos, de los momentos vividos a lo largo del año y de tomar conciencia de los motivos por los cuales algunas de las metas que nos propusimos no se han alcanzado.

 

shutterstock_225857830-1

 

Este balance no tiene la finalidad de despertar malestares o de cuestionar el camino trazado, sino que nos tiene que servir para reflexionar y hacer un ejercicio de autocrítica constructiva para tratar de mejorar, superar los obstáculos o las dificultades que hayamos encontrado, y sacar provecho de todas las experiencias, sean positivas o negativas, porque, a pesar de que hayamos podido vivir momentos duros (pérdidas, rupturas, fracasos, decepciones…), de todo, siempre podemos extraer un aprendizaje.

 

shutterstock_183125153

 

Aprender a hacer frente a situaciones complicadas también forma parte de la vida y, a pesar de que en un primer momento nos podamos sentir perdidos o experimentar desesperanza, dolor, tristeza, decepción… a medio-largo plazo, una vez superada la inestabilidad inicial, las crisis y los momentos difíciles refuerzan nuestro afán de superación y suponen una valiosa oportunidad de crecimiento personal porque, entre otras cosas, aprendemos a vivir de una manera diferente.

 

shutterstock_226884475

 

Si este año has vivido alguna situación complicada, un buen ejercicio sería analizar qué sensaciones has experimentado, qué estrategias has puesto en marcha para afrontar lo que ha pasado, qué has aprendido de la experiencia… Es una manera de poder darte cuenta de los esfuerzos realizados para seguir adelante y reforzar tu sensación de valía personal.

 

shutterstock_183690440

 

Por otra parte, igual que somos capaces de analizar las cosas negativas, también tenemos que permitirnos apreciar, tal y como se merecen, todas las cosas buenas que nos han pasado, y premiarnos por todo aquello que hemos conseguido.

Para repasar la parte positiva de tu 2016, puedes ayudarte mirando tu agenda, revisando tus fotos o escuchando canciones que te recuerden momentos especiales vividos… y, mientras, ir tomado conciencia de las sensaciones agradables que experimentaste; ser capaz de recordar detalles de la situación, con quien estabas… Todo esto hará aumentar tu sensación de bienestar, a la vez que sentirás ganas de seguir coleccionando más aventuras vitales.

 

8500366180_d03d66bfb0_o

 

Y para seguirte cuidando y mimando tal y como te mereces este próximo 2017, una buena idea es hacerte como auto regalo una cajita vacía donde ir coleccionando las buenas sensaciones, los momentos positivos y las metas que vayas consiguiendo… En la cajita puedes ir metiendo papelitos escritos con cosas buenas que te vayan sucediendo, guardar objetos pequeñitos que te evoquen sentimientos positivos…

 

shutterstock_136855916

 

Que tu “cajita positiva” de 2017 acabe repleta de buenos recuerdos y que pases una…

15894961620_7c5e89b7a8_o

 

 

Apúntate al boletín de Autoestima y Salud Emocional

Recibirás mensualmente noticias de autoestima, emociones, sentimientos, habilidades sociales y bienestar emocional.